¿Estás buscando una excursión por Edimburgo que te permita disfrutar de la naturaleza y de la cara más tranquila de la ciudad?
Hoy te proponemos un paseo plácido y colmado de verde por el lago de Duddingston y el Dr Neil’s Garden, el jardín secreto de Edimburgo. Prepara la cámara y un buen libro, ¡y vayamos a descubrir estos dos pequeños oasis de la capital escocesa!
Paseando por el barrio de Duddingston
El punto de partida de este paseo es la antigua aldea de Duddingston, en el sureste de Edimburgo.
A pesar de que hoy forma parte del área metropolitana de la capital, este barrio de callecitas residenciales se mueve todavía a ritmo pausado y cotidiano.
Si te apetece explorar los senderos del parque de Holyrood y subir a Arthur’s Seat, Duddingston es un punto de partida perfecto.
También lo es si quieres saciar la sed en un típico bar escocés, ya que aquí se encuentra The Sheep Heid Inn, uno de los pubs más antiguos de Edimburgo: ¡dicen que en este lugar ha habido un pub desde 1360!
El Duddingston Loch, refugio de aves
En tan solo unos minutos llegarás al destino de hoy: el Duddingston Loch and Bird Sanctuary, un lago de aguas plácidas que se extiende en los confines del Holyrood Park.
Junto con Dunsapie Loch y St Margaret’s Loch, el de Duddingston es uno de los tres lagos que encontrarás en el parque.
Aunque tiene una característica especial: en 1925, lo declararon reserva natural y refugio de aves, y durante todo el año atrae a ornitólogos y a amantes de la naturaleza.
Acércate a la orilla norte (la parte sur no tiene acceso) y empápate de la tranquilidad del lago de Duddingston, rota solo por el aleteo de los patos, gansos y cisnes que chapotean en el agua y descansan mansamente en la orilla, siempre al acecho de las familias que de vez en cuando se acercan con un poco de pan.
Si visitas el lago en invierno, es posible que lo encuentres helado. En el pasado, se usaba para practicar deportes como patinaje sobre hielo o curling.
Y, de hecho, uno de los cuadros más famosos de Escocia se sitúa aquí: The Skating Minister, de Henry Raeburn, muestra a un pastor patinando sobre las aguas heladas del Duddingston Loch.
Durante el resto del año, el entorno, poblado de bosques, cañaverales y matorrales, es ideal para una excursión por Edimburgo en un día de sol (o sin lluvia… ¡tampoco queremos pedir mucho!).
Puedes continuar con el paseo subiendo a Arthur’s Seat o siguiendo el Innocent Railway, una ruta para caminantes y ciclistas que conecta el oeste de Edimburgo con los barrios de Duddingston y Craigmillar.
Si te apetece una dosis de historia, en apenas 30 minutos llegarás al Craigmillar Castle, el castillo menos conocido de Edimburgo y una visita muy interesante para completar el día.
Dr. Neil’s Garden, el jardín secreto de Edimburgo
Pero, antes de abandonar esta zona, te queda todavía una sorpresa por descubrir: el Dr Neil’s Garden, el jardín secreto de Edimburgo.
El apodo que le han dado los vecinos de Edimburgo no es en vano: a pesar de que este precioso jardín se encuentra a solo unos metros del lago de Duddingston, si no conoces su existencia es muy difícil que te topes con él por azar.
Incluso siguiendo las indicaciones que proporciona la web, la primera vez que quisimos visitarlo dimos unos cuantos tumbos antes de dar con él. ¡Parece imposible que en la tranquila calle de Old Church Lane se esconda este rincón excepcional!
Esta es la manera más fácil de llegar. Desde la carretera que conduce al lago, busca las puertas de la iglesia Duddingston Kirk y camina hacia la izquierda.
Unos metros más allá encontrarás una verja metálica señalizada como Duddingston Manse; ábrela y adéntrate en un pequeño jardín con una caseta de madera con baños al fondo a la derecha.
Acércate y encontrarás otra puerta, abierta hasta el atardecer. Crúzala, y, ahora sí… ¡has llegado al Dr Neil’s Garden!
La imaginación y la dedicación de una pareja de médicos de la zona, el doctor Neil y su esposa, dieron forma en 1965 a las terrazas repletas de vegetación y flores que se extienden frente a ti, desparramándose poquito a poco hacia las aguas del lago de Duddingston.
Aunque ambos fallecieron en 2005, este pequeño oasis se ha conservado tan frondoso y colorido como cuando los Neil se encargaban de él.
Los senderos serpentean entre los árboles, y aquí y allá se esconden sorpresas: un estanque, un pequeño puente y muchos bancos donde sentarte a contemplar el lago y a dejarte invadir por la calma de este enclave aislado y pacífico.
El Dr Neil’s Garden es uno de los rincones menos conocidos de Edimburgo, pero también uno de los más especiales, y, sin duda, uno de nuestros favoritos.
¿Has visitado ya este jardín y el lago de Duddingston?
Visitar el lago de Duddingston y el jardín del Dr Neil
- Duddingston Loch | Old Church Lane, Duddingston Village, Edinburgh EH15 3PX
- Dr Neil’s Garden | La entrada es gratis, pero puedes dejar un donativo.
- Cómo llegar: a ambos lugares puedes llegar en los autobuses urbanos de Lothian Buses. Otra opción es ir a pie: desde el Parlamento y el Palacio de Holyrood, puedes tomar Queen’s Drive, un camino que rodea el parque de Holyrood, y luego seguir por Old Church Lane hasta el lago en una excursión de aproximadamente una hora.
- 10 excursiones entre naturaleza en Edimburgo.
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Hola Angie, mis hermanos y yo estamos preparando un viaje especial para mi madre que cumple 60 años, queremos ir en Abril a Edimburgo y tenemos 2 días y medio. He leído tus post y me encantan, Un día estaremos en edimburgo y el otro iremos a Stirling y varios castillos cercanos que hemos visto en tus post. Pero el medio día que nos queda querría VISITAR EL LAGO DE DUDDINGSTON Y EL JARDÍN DEL DR NEIL, crees que sería tiempo suficiente el medio día antes de coger el vuelo a las 16:30, entre las 9:00 y las 12:00? O crees que es poco tiempo, es mejor dedicarlo a otro lugar? Recomiendas alquilar coche o es posible coger un bus. A mi madre le encantan los paisajes pero no está acostumbrada a andar mucho, además tenemos perder el vuelo y habría que almorzar, recomiendas un lugar cercano? Muchas gracias.
¡Hola, Alba! Al jardín del Dr Neil podéis llegar en bus, hay uno que para muy cerca. Y allí al lado tenéis un pub muy típico para almorzar, The Sheep Heid’s Inn. El jardín y el lago se pueden visitar bien en 1 hora así que el tiempo no es un problema.
Pero si no, otra opción sería ir al Jardín botánico de Edimburgo, que es gratis y es precioso. También se puede llegar en bus y lo podéis visitar en 1:30 h o 2 horas paseando. ¡Un saludo!
El otro día, por fin, me puede acercar al Dr. Neil’s Garden… Y hoy voy y me topo con tu post 😉 Un lugar fabuloso…
Espectacular lugar parece éste, y más al leer sobre toda la historia en su página web. Sin duda, vale la pena una visita para rodearse de verde y de paz.
Y una vez más, me quito el sombrero. Otro sitio pendiente en mi agenda gracias a ti.