Ruta por el oeste de Escocia: Oban, Castle Stalker y Fort William

¿Estás planificando una ruta por Escocia y te apetece recorrer la maravillosa costa oeste? Hoy te proponemos un recorrido de un día que empieza en Oban y termina en Fort William, pero que por el camino guarda muchas posibilidades… ¡y sorpresas!

¿Qué tal explorar la Isla de Mull, ir en barco hasta un castillo en medio de un lago o recorrer el estremecedor valle de Glencoe? Ponte cómodo al volante, ¡nos vamos de ruta en coche por el oeste de Escocia!

Cómo enlazar con la ruta por las Highlands

Si te fijas en esta ruta de 3 días por las Highlands de Escocia, verás que te proponemos salir desde Edimburgo y adentrarte en las Tierras Altas a través de Stirling y Callander hasta llegar a Glencoe.

Es la opción más directa, pero, si el tiempo no es problema, otra posibilidad es la siguiente:

1. El primer día, sal desde Edimburgo en dirección oeste, visita el precioso Loch Lomond y el parque nacional de los Trossachs y haz noche en Oban (unas 3:30 h de coche en total). Por el camino, puedes parar en las ruinas del fotogénico castillo de Kilchurn.
2. Y, el segundo día, emprende la ruta que te proponemos en este artículo hasta Fort William.

Ruta por el oeste de Escocia

Y ahora sí, ¡en marcha! Si aún no has conducido por Escocia, échale un vistazo a este artículo con consejos para conducir por la izquierda, aunque las carreteras que utilizarás en este recorrido son bastante tranquilas. Aquí tienes el mapa:

Oban, la puerta de las islas

Comenzamos la ruta por el oeste de Escocia en Oban. A pesar de no llegar a los 10 000 habitantes, es el mayor pueblo de esta zona del país y está acostumbrado a recibir turismo, como notarás en la oferta de hoteles y B&B, cafeterías y restaurantes.

Oban se levanta alrededor de una bahía, que se perdería en el océano si no fuera porque frente al pueblo, en posición protectora, aparecen algunas de las bonitas islas de las Hébridas Interiores, como la pequeña isla de Kerrera o la isla de Mull, de tamaño considerable.

Por ese motivo, a Oban se lo conoce como la puerta de las islas.

Si quieres dedicar un día (o más) de tu viaje a visitar la isla de Mull, este es el momento de dirigirte al puerto de Oban y embarcar en uno de los ferrys de Calmac. Aquí tienes una buena guía para visitar la isla.

Si vas apurado de tiempo, en la bahía también operan muchas compañías que se dedican a hacer viajes de unas 10 horas combinando varias islas, como Mull, Iona y Staffa.

¿Y qué puedes hacer en Oban en tierra firme? Una idea es subir hasta la McCaig’s Tower, una especie de anfiteatro inacabado que un filántropo comenzó construir en lo alto de una colina y que hoy en día regala unas preciosas vistas de la bahía.

Otro paseo muy agradable con vistas al mar es ir siguiendo la bahía en dirección norte para llegar a un castillo medieval en ruinas, el Dunollie Castle.

Recorriendo la costa

Tras dedicar una mañana a visitar Oban y comer en alguna de sus cafeterías, ponte en marcha y toma la A85 hacia el norte. Los 10 primeros minutos son por el interior, hasta que cruzas por el puente Connel Bridge y te desvías hacia la A828, la preciosa carretera de la costa oeste de Escocia.

En realidad, conduces junto a lagos: primero, el Loch Creran, y más adelante, el Loch Linhe. En el camino hacia Fort William, nosotros paramos varias veces en miradores y cafeterías para acercarnos a los lagos y disfrutar de las vistas. Pero, si solo paras una vez, puedes hacerlo en Portnacroish para ver el Castle Stalker.

Castle Stalker, un castillo en el lago

Este castillo, construido alrededor de 1446 por la familia Stewart, se levanta en el lago, y hay dos formas de acercarte:

• Pasar de largo Portnacroish y parar en la cafetería Castle Stalker View (a la izquierda de la carretera). Como el nombre indica, desde allí se ve el castillo, y hay un sendero que baja a la orilla y te acerca un poco más. Cuando estuvimos, el sendero estaba cerrado, aunque no sabemos si era algo temporal.
  
• Llegar hasta el aparcamiento que hay cerca del agua. Desde Oban, tienes que atravesar Portnacroish, y el desvío que tienes que tomar está a la izquierda, justo después de la casita blanca de dos pisos del restaurante The Old Inn. Es un poco confuso, ya que en esta zona hay varias casas con caminos privados, pero, aunque tengas que dar un par de vueltas, no tiene pérdida.

Por fuera, la imagen del Castle Stalker emergiendo entre las aguas del Loch Laich es imponente, una de esas postales que Escocia nos regala. Por su situación, recuerda un poquito al castillo de Eilean Donan, aunque aquí no hay pasarela ni forma de acercarte a no ser que en el equipaje lleves barco y remos.

La única forma de acceder a la isla y al interior del castillo es en una de las visitas guiadas que se organizan de marzo a octubre. Tiene que ser una experiencia muy bonita, aunque es de gestión privada y ofrecen pocas plazas al día, por lo que te recomendamos reservar la entrada con antelación. Nosotros lo intentamos varias semanas antes y ya no quedaban plazas.

Si tú también tienes que conformarte con verlo desde lejos, el Castle Stalker no te ocupará mucho tiempo. Una parada rápida, pero que sin duda merece la pena.

Recorriendo el valle de Glencoe

Continuamos por la carretera de la costa, que no se aparta del Loch Linhe. El paisaje es tan calmado y pintoresco que el trayecto hasta el pueblo de Glencoe, de unos 20 minutos, pasa en un suspiro.

Aquí, merece muchísimo la pena que te desvíes a la derecha por la A82 y atravieses el valle de Glencoe, sus montañas y riachuelos. Es uno de los parajes naturales más impresionantes de Escocia, y vale la pena recorrerlo más o menos hasta la pista de esquí, dar media vuelta y regresar por el mismo camino (unos 20 minutos en cada sentido).

Es difícil describir el valle con palabras, pero en este artículo te contamos cómo visitar Glencoe y te hablamos de la masacre que allí tuvo lugar.

Fort William y Glenfinnan

Desde Glencoe Village hasta Fort William te esperan de nuevo unos 20 minutos. Conforme te acerques al pueblo, un poquito mayor que Oban, el paisaje dará paso a un tráfico cada vez más animado.

En Fort William no hay mucho que ver, pero sí un buen puñado de tiendas, cafeterías y hoteles, ya que mucha gente lo utiliza como base para hacer excursiones y montañismo en los alrededores. También encontrarás muchos B&B un poquito más adelante, en los pueblecitos de Caol y Corpach.

Dónde dormir en Fort William: Haz click aquí para ver hoteles y B&B

Si duermes en la zona, podrías terminar aquí la jornada… O seguir al volante unos 25 minutos más para visitar otro de esos rincones de Escocia que ponen la piel de gallina, que, como ves, en esta zona abundan. El destino es Glenfinnan, hogar del monumento a los jacobitas frente al Loch Shiel y del viaducto por el que traquetea el tren de vapor Jacobite en una escena que hicieron famosa las películas de Harry Potter.

Si tu ruta por las Highlands de Escocia sigue hacia la Isla de Skye, puedes visitar Glenfinnan al día siguiente por la mañana. Pero, si desde Fort William ya te marchas en dirección a Inverness, desvíate un poco y haz una parada rápida allí y seguro que no te arrepientes. En este artículo te contamos cómo visitar Glenfinnan, subir al mirador del lago y desde dónde ver pasar el tren.

Y ahora sí: te dejamos retirarte a tu alojamiento y dar por terminado este día tan intenso… Esperamos que hayas disfrutado muchísimo de esta ruta por la costa oeste de Escocia, desde Oban hasta Fort William pasando por el Castle Stalker, y que el resto del viaje también sea estupendo. Conociendo este país, ¡seguro que lo será!

Ruta por la costa oeste de Escocia

• Total del recorrido: unas 2:30 h de coche + las paradas que vayas haciendo.
• Alojamientos: Hoteles en Oban – Hoteles en Fort William
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• Web del Castle Stalker con los precios y el calendario de visitas
• Ruta completa por las Highlands de Escocia